2023-10-10

El brote: la joya del off “solo para entendidos” que terminó siendo una máquina de agotar entradas

Fuente: La Nación de Argentina

Luego de casi 80 funciones en el Teatro del Pueblo a sala llena, con tickets que se vendían con dos meses de anticipación, la obra de Roberto Peloni y Emiliano Dionisi se muda al teatro Maipo.

Esta historia de podría contar de esta forma. El brote es un unipersonal a cargo de un actor que no tiene llegada mediática ni nada de esas cuestiones supuestamente rendidoras en las boleterías. El director y dramaturgo, tampoco (aunque en cierto circuito, sean artistas de renombre, trayectoria, merecido prestigio). El texto de la obra está cargado de citas teatrales que van desde Shakespeare hasta Sófocles pasando por Calderón de la Barca. Dura una hora y 40 minutos, superando la extensión media de las obras de la escena alternativa. No cuenta con un gran despliegue escenográfico, ni espejos de colores ni nada de esas cuestiones que podrían ser materiales tentadores para las redes sociales. Apelando a una expresión muy sencilla, si bien es una de esas “obras para reír” su contenido dramático es permanente.

Todo daría para imaginar que un espectáculo de este tipo solo tendría llegada entre el público teatrero, pero nada de eso de eso sucedió y nada de eso sucede con El brote. Desde su estreno el 13 de febrero no paró de cosechar elogiosas críticas (”una otra poética clase magistral de actuación” fue el título de la reseña de Carlos Pacheco para LA NACION). Pasó de hacer una función semanal a tres, algo excepcional para la lógica de representación del circuito independiente. Así fue ampliando su llegada hacia nuevas audiencias hasta transformarse en un verdadero fenómeno de público: siempre agotó las cien localidades del Teatro del Pueblo, que empezaron a venderse con dos meses de anticipación. Salvando las distancias, es una especie de Tootsie del teatro alternativo. Como parte de la propia lógica de este exquisito montaje que rompe con supuestas reglas establecidas, desde hoy se muda al teatro Maipo, con sus 600 localidades.

Detrás de este emprendimiento están el talentoso actor Roberto Peloni y el director Emiliano Dionisi, quien también fue el que escribió esta obra en la que a “un actor se le comienzan a desdibujar los límites entre la ficción y la realidad, y ahora desconfía de quien escribe los acontecimientos de su vida”, como se presenta ante su público esta nueva producción de la Compañía Criolla. Pero no están solamente ellos dos detrás de esto. El dream team se completa con Micaela Sleigh, en la escenografía; Agnese Lozupone, en la iluminación; Martín Rodríguez, en el diseño sonoro y Sebastián Ezcurra en la producción artística. Todos ellos son piezas claves de esta rara y hermosa avis del teatro (sea alternativo, comercial y lo que uno imagine).