2022-09-13

Gabriela Hernández, actriz y agnóstica: “Mi primera educación sexual fue leyendo la Biblia”

Fuente: The Clinic

Por estos días la actriz Gabriela Hernández (83) se encuentra presentando Molly Bloom, un monólogo de una mujer de tercera edad que, en una noche de desvelo, reflexiona sobre sus experiencias amorosas y sexuales. En conversación con The Clinic, la actriz conversó sobre la sexualidad, su relación con el público, con las redes sociales, sus experiencias con drogas y el presente político: “Las marcas de las dictaduras quedan por años. Qué mejor muestra que el Rechazo”, comenta.

Está a cuatro meses de cumplir 84 años, pero maneja la tecnología como poca gente de su edad. Esta mañana de miércoles se encuentra sentada en el comedor de su departamento ubicado en Las Condes revisando en su notebook los resultados de un examen PCR. “Estamos bien, chinito. Salió negativo”, dice Gabriela Hernández con una sonrisa.

-Se maneja usted con la tecnología, ah…

-Por supuesto pues. ¡Si soy influencer!

En su cuenta de instagram la actriz Gabriela Hernández comparte con sus seguidores diferentes aspectos de su vida personal. Los libros, adornos, plantas y electrodomésticos que le llegan de regalo. Sus recuerdos familiares, campañas publicitarias con supermercados y empresas de seguridad, cremas, vinos, bidones de agua purificada y las trastiendas de sus participaciones en las franjas presidenciales en apoyo al presidente Gabriel Boric y el Apruebo. Es, en cierta forma, una influencer senior.

“Me comentan mucho. Algunos me ponen ‘me encanta cómo eres’, ‘yo pienso igual que usted’, y otras: ‘vieja comunista’, ‘te pagaron no sé cuánto por hacer la franja’. Pero las bloqueo y chao”, cuenta Hernández con soltura.

También comparte, por supuesto, los nuevos proyectos teatrales en los que se embarca cada cierto tiempo. Uno de esos es Molly Bloom, el monólogo de 80 minutos que se encuentra en la cartelera del Teatro UC desde el 31 de agosto al 15 de septiembre, en coproducción con la Fundación Teatro a Mil.

La obra, dirigida por Viviane De Muynck y Jan Lauwers y protagonizada por Gabriela Hernández, está basada en el capítulo final del libro Ulises de James Joyce, y cuenta los pensamientos que la protagonista de tercera edad tiene en una noche de insomnio, haciendo un repaso por “su marido, su amante, su primer amor y el hombre que la hace anhelar”.

-¿Qué particularidades tiene este texto con usted, con su propia historia?

-Todo. Este monólogo lo leí a los 17 años, en la novela Ulises. El último capítulo, en el cual se basa la obra, es una mezcla de sexualidad total con poesía. Obscenidad, humor, esa cosa de una mujer con los pies en la tierra. Incluso medio pueblerina, porque está basado en la mujer de James Joyce, quien venía del campo. Fueron muy infieles el uno con el otro, en la vida real. A mí, como soy partidaria del amor libre, me parece perfecto. Está muy basado en Nora, la mujer de Joyce. Es una mujer muy libre, un espíritu libre que no se somete a la autoridad patriarcal del hombre. Lo increíble es que, publicado en 1922, Joyce retrata el alma de una mujer libre. Es acojonante cómo la conocía y cómo escribe sobre ella. Porque es un personaje adorable. Hay alguna señora que se han salido del monólogo, pero calladitas… Unas dos o tres que lo encuentran un poco potente.