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Temática Laboral: instalar el discurso y la crítica por medio del teatro


Temática Laboral: instalar el discurso y la crítica por medio del teatro

En un año polémico por la discusión de la Reforma Laboral, los paros del mundo sindical y las diferentes asociaciones de funcionarios, se presentan en el Festival Internacional Santiago a Mil los montajes El Milagro del jaguar y No tenemos que sacrificarnos por los que vendrán, obras que reflexionan sobre el sistema económico, el abuso de poder y la idiosincrasia chilena.

Por Diana Torres

Este 2015 ha sido un año de discusión en torno a la Reforma Laboral, de hecho la semana pasada los senadores de la Nueva Mayoría, Juan Pablo Letelier (PS), Carolina Goic (DC) y Adriana Muñoz (PPD), se opusieron a las indicaciones que presentó el Gobierno porque vulneraban el derecho a la huelga efectiva, según indicaron.

Tal reunión, que se prolongó hasta las dos de la mañana, representa la punta del iceberg, ya que la oposición también llega del mundo sindical quienes acusan al Gobierno de llevar adelante un proyecto que favorece a las empresas y que por tanto retrocede en material de negociación colectiva y huelga.

En medio de esta discusión, se presentan los montajes El milagro del jaguar y No tenemos que sacrificarnos por los que vendrán en la última versión del  Festival Internacional Santiago a Mil. Ambas obras, reflexionan sobre el sistema laboral heredado de la dictadura, el abuso de poder y la idiosincrasia del chileno a la hora de relacionarse con sus compañeros de trabajo en un mundo en que el dinero está por sobre los valores.

¿Jaguares de Latinoamérica?

El milagro del jaguar es la cuarta obra de la compañía Chimba Teatro, y la segunda obra de la directora y dramaturga, Gabriela Arroyo, que sucede a Infantes. Ambos montajes escritos junto a Ezzio Debernardi y dirigidas por ella, y cuyo tema principal es la inmigración, el sistema laboral y el sistema económico en Chile.

La historia transcurre durante el 24 de diciembre en una oficina del centro de Santiago, en donde seis trabajadores (cinco chilenos y uno colombiano) se reúnen para la convivencia y la entrega de regalos del amigo secreto. Una situación tan banal que conllevará a conflictos, ya que poco a poco se muestran sin tapujos.

Para Gabriela Arroyo, lo esencial del montaje es “reflejar que, esta idea que somos los jaguares de Latinoamérica, con un país maravilloso, con un sistema económico envidiable, con oportunidades laborales y un alto índice de calidad de vida, es una descripción muy alejada de nuestro presente, de nuestra realidad actual”, sentenció.

Desde ese punto de vista, para la autora es importante traspasar el discurso y la crítica por medio del teatro, sobre todo si la reflexión viene desde la comedia, ya que “por medio de lo burdo y grotesco, provocamos reflexiones sobre cómo somos los chilenos, cuáles son nuestras características, cómo nos relacionamos, y cómo nos defendemos ante este sistema para ser personas exitosas”, afirmó.

Plan Laboral: Herencia permanente de la Dictadura

En el año 2012, y luego de tres décadas de espera, la biblioteca del Congreso Nacional desclasificó “Las Actas N° 372 – A”, que consistía en una transcripción detallada de todo lo dijeron la Junta Miilitar, José Miguel Piñera y ministros civiles de la dictadura, durante cinco días de reuniones secretas en junio de 1979.

Este documento histórico, contenía un conjunto de reformas que se conocerían como Plan Laboral, es decir el conjunto de leyes que determinan, hasta hoy, la organización sindical y la negociación colectiva.

De allí nació el germen en Colectivo Zoológico para llevar a las tablas No tenemos que sacrificarnos por los que vendrán, un montaje cuyo título es una frase literal que pronunció Augusto Pinochet y que rescata un 95 por ciento de lo que se dijo, murmuró, gritó y argumentó durante esos días.

Cuatro generales mayores, una secretaria y un ministro joven, son los encargados de condensar un hecho que provocó lo que hoy conocemos como la realidad laboral de nuestro país.

Al respecto, para el dramaturgo Juan Pablo Troncoso, lo que más sorpresa les provocó fue “la violencia real y simbólica que genera que un grupo de personas, encerradas en cuatro paredes, hablen del mundo y la sociedad como si no existieran. En el fondo, tienen un lienzo en blanco donde van tomando decisiones a partir de pura ideología desligada de la realidad y con intereses claros. Uno se da cuenta la vigencia y brutalidad con la que operaron los civiles y los militares en este país”, enfatizó.

La obra, que es el tercer montaje de la compañía ha tenido otras temporadas, justo en el momento en que se ha estado discutiendo sobre la Reforma Laboral, y desde la mirada de Troncoso el panorama es complejo, ya que “hay temas que están muy instalados en la subjetividad de los chilenos, como por ejemplo el valor de la propiedad privada, el Estado como una especie de árbitro imparcial, la satanización de la huelga y sobre todo el poco poder de los sindicatos, confederaciones y asociaciones. Eso está instalado constitucionalmente, pero lo que ellos hicieron en ese momento y en esas actas es vivenciado por todos los chilenos y por todas las personas que han trabajado en este país”, finalizó.

El milagro del jaguar estará en cartelera desde el 14 al 16 de enero en Teatro del Puente, mientras que la programación de No tenemos que sacrificarnos por los que vendrán es desde el 22 al 24 de ese mismo mes en Teatro UC.  Todo esto en el marco del Festival Internacional Santiago a Mil. 

Foto: Fototeatro. Lorenzo Mella
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