2.10.2015 | None
Los australianos Back to Back Theatre debutan en FIBA en Chile
El pasado miércoles 28 de septiembre, los australianos Back to Back Theatre por fin aterrizaron en el aeropuerto de Santiago, luego de su paso por Buenos Aires. Cargados con 50 piezas de vestuario y calzado de estilo militar e hindú, y otros accesorios como alfombras de yoga y dos máscaras de elefante que usa uno de sus protagonistas; la compañía llega para presentar tres funciones de Ganesh versus the Third Reich en la tercera versión del Festival Internacional de Teatro de Buenos Aires (FIBA) en Chile.
El montaje será el encargado de inaugurar el evento, y pretende sorprender al público chileno con la aventura del dios Ganesh, quien viaja por la Alemania nazi para reclamar la esvástica, un símbolo hindú milenario. De forma paralela se creará un juego metateatral, donde los actores –que cuentan con algún tipo de discapacidad física y mental-, empezarán a sentir la pesada responsabilidad que tienen como narradores, y cuestionarán la ética de la apropiación cultural que da vida a la historia original.
“En las dos subtramas de la narración se habla de poder, de dominación, de verdad y de ficción. Y las dos se van entrelazando hasta casi la superposición”, explica la periodista Verónica Pages de La Nación de Argentina, luego de que el montaje se presentara tres días en el X Festival Internacional de Teatro de Buenos Aires. “Más allá de la bellísima puesta en escena del viaje de Ganesha -con unos cortinados transparentes que recrean bosques, montañas, trenes y noches luminosas-, la obra bien podría ser la misma. De hecho, lo es”, agrega en una de las positivas críticas que recibió el espectáculo.
Comienzo de un viaje
El origen de este particular montaje comenzó en 2008, cuando dos actrices de la compañía Back to Back Theatre comenzaron a dibujar los que serían los personajes principales de la historia. “Rita Halabarec pasó nueve meses dibujando a Ganesh con lápiz Bic azul sobre montones de papel blanco, mientras Sonia Teuben dio origen a un terrorífico skinhead neonazi en la sala de ensayo. Nuestra historia fue aprehendida y realizada por múltiples mentes”, explicó Bruce Gladwin, director de la compañía Back to Back Theatre desde 1999, a Fundación Teatro a Mil.
Sin embargo, por muy novedosa que pareciera la idea, las dudas del resto de los integrantes comenzaron a aparecer. “Cuando concebimos la obra, inicialmente pensábamos que no teníamos ningún derecho a representar la pieza”, recuerda el director. Y agrega: “Pero en Austria tuvimos la oportunidad de ir a un campo de concentración en Linz donde se exterminó a discapacitados. La experiencia fue muy profunda, aunque no todos los actores fueron; para algunos fue muy difícil. Pero esa experiencia nos empujó como compañía de actores con discapacidad, porque nos dimos cuenta de que teníamos no sólo el derecho sino también la responsabilidad de hablar de eso”.
Responsabilidad que se ve reflejada en el escenario, donde sus protagonistas realizan un trabajo “emocionante, y también hilarante”, según palabras de Verónica Pages. A pesar de contar con discapacidades físicas y mentales, se refieren a ellas “con una frontalidad que podría sorprender o incomodar a la platea, pero a ellos no; se contestan, se defienden y se ríen de sí mismos. Esto, y la manera en la que se tratan de apropiar de la historia que deben narrar -que cuestionan palmo a palmo- crea un clima, por momentos, sobrecogedor”.
Ese ambiente no es casualidad. Así estuvo pensado, y eso es lo que el grupo y su director, desean provocar. “Nosotros queremos que la audiencia se sienta confundida, aterrorizada de algún modo, insegura y expectante sobre lo que va a suceder”, aseguró Gladwin en una entrevista al diario El Clarín. De seguro, una atmósfera que se repetirá también en Santiago.