Arturo Labra, director de la Corporación Cultural CEbra: “nos interesa el circo porque es un arte colectivo y colaborativo”

Han pasado 20 meses desde que se inauguró el Galpón Cultural CEbra, espacio administrado por la corporación cultural del mismo nombre, que está ubicado en el corazón de la Ciudad Empresarial, en Huechuraba. Hablamos con Arturo Labra, director de la organización: “Aquí hay dos comunidades muy fuertes: la empresarial y la poblacional. Desde ahí creemos que el circo, más bien el arte, puede generar intercambio, encuentro, bienestar y confianza”, dice.

Por Sergio Espinosa

3 mil metros cuadrados y 8 metros de alto convierten al Galpón Cultural CEbra en un escenario ideal para agrupaciones de circo contemporáneo y de teatro callejero. Eso lo saben muy bien las trece compañías que hasta la fecha han hecho residencia en este lugar. “Lo abrimos en conjunto y en colaboración con la compañía Diminuto Circus a fines del año 2015, cuando ellos querían hacer el remontaje de una obra y necesitaban un espacio amplio para poder remontarla”, recuerda Arturo Labra, Director de la Corporación Cultural.

El galpón, es sólo uno de los proyectos en que esta corporación está trabajando, que se suma al trabajo territorial que realizan en la comuna de Huechuraba y a brindar un espacio óptimo a compañías que quieren realizar una residencia creativa. “Somos una organización que brindábamos todas las facilidades para que el arte surja, sin ningún sentido del lucro y con muy poca expectativa. Trabajamos desde la observación y trabajamos con una visión muy de largo plazo, y esa visión nos la ha dado la espiritualidad. Dentro de nuestra mirada resaltamos valores tradicionales de circo, como la colaboración”, explica Labra.

¿Por qué deciden hacer circo, Arturo?

A nosotros nos interesa el circo porque es un arte colectivo y colaborativo. Aquí en Ciudad Empresarial hay dos comunidades muy fuertes: la comunidad empresarial y la comunidad poblacional. Desde ahí creemos que el circo, más bien el arte, puede generar intercambio, encuentro, bienestar y confianza. Hay una relación de miedo entre el mundo poblacional y el mundo empresarial, y el circo trabaja como un puente que puede hacer dialogar y encontrar a estos dos mundos que hoy día están estigmatizados y polarizados.

¿Cómo materializan este encuentro entre estas dos comunidades?

Las compañías postulan a la residencia, quedan y les pedimos funciones como copago, no les pedimos ni un peso, nosotros nos hacemos cargo de todos los gastos. Un mes de residencia, es una función, una obra, un acto o un número como copago. Las funciones las hacemos en el galpón, otras veces nos vamos a La Pincoya o acá en la ciudad empresarial intervenimos calles. Tres instancias donde irrumpimos: los dos grupos de interés, que son los empresariales y los poblacionales y el galpón, ahí a veces se cruzan, llegan ejecutivos, llegan pobladores, artistas, punkis. Hay un cruce bastante interesante en un ambiente bastante underground, que es un galpón

Tienen varios espacios dentro de la comuna. ¿Cómo abordan el tema del financiamiento?

Nuestro modelo, en términos generales, trabaja bien a la vanguardia. Estando en uno de los polos empresariales más importantes, no recurrimos a los mecanismos tradicionales de sustentabilidad o soporte. El mercado inmobiliario de oficinas, hasta hace poco, estaba en el momento más deprimido, en todo Santiago había cerca de un 30% de oficinas en oferta desocupadas. Y de ahí nos movemos, están los espacios, nos prestan los espacios y les damos vida. Nosotros estamos acogidos a la ley de donaciones culturales, entonces cuando los empresarios, en este caso los donantes, nos prestan los espacios, les entregamos un certificado de donación, y eso también los ayuda. El lugar sigue en oferta y puede venir un corredor de propiedades cada dos semanas. Así, ya tenemos cuatro espacios en ciudad empresarial: una galería de arte (Casa Cebra), el galpón cultural (Galpón Cebra) y tenemos un dojo de practica de artes marciales, donde hay 12 disciplinas sucediendo todos los días, que está en la terraza de un edificio; y tenemos esta oficina.

Las audiencias siempre son una preocupación en las instituciones culturales ¿Qué trabajo están haciendo en esta materia?

Hay un tema que el Consejo de la Cultura lo sabe bien, que tiene que ver con la generación de audiencias, y nosotros también sentimos que es clave. En términos concretos, por ejemplo, nuestro Festival del sábado 2 de septiembre, comienza el martes previo. Cada día iremos a un colegio con la compañía Diminuto Circo, y en el recreo de las 11 vamos a montar un espectáculo de circo de 35 minutos, que tiene que ver con hacer promoción y difusión, pero también tiene el foco de generar audiencias, de compartir, de enseñar y de ir. No solamente por los niños, sino que, por los profesores, ellos son un principal motor y nexo dentro de la cadena de interés, de reflexión y atracción artística.

Por otro lado, tenemos el público de la ciudad empresarial, que es gente que si paga por un espectáculo, pero es un público bastante seco, miedoso y cansado. En general la gente que viene a trabajar acá viene solo a eso, a trabajar. Hemos hecho algunas intervenciones en la calle y es loco porque la gente no nos mira, miran su teléfono celular y desde ahí nos miran. Nos ha costado recibir feedback, es un público que esta con muchas corazas. Orgánicamente empezamos a trabajar con las comunidades y empezamos a estudiarlas. Si bien hay gente que viene solo por un cheque, también hay gente que tiene aptitudes, valores y talentos que quieren expresar. Una vez al mes hacemos encuentros en nuestra galería, hacemos tarde de djs, hay varios djs residentes que son telefonistas u operarios de un banco.

El 2 de septiembre celebrarán el Día Nacional del Circo con un festival ¿Qué actividades tiene preparadas?

Vamos a hacer nuestro segundo concurso de semáforos. Estamos llamando a semaforistas de todo Santiago a subir un video a nuestras redes y los 15 con más me gusta van a ser convocados a una gala de semáforos que se va a hacer en una carpa de circo en la plaza de La Pincoya. Los dos mejores, que van a ser elegidos mediante un jurado, van a ir a presentarse al festival de circo en escena en Córdova. También va a estar el museo del circo chileno, que presenta toda la historia del circo en Chile, circo tradicional, con objetos, libros, zapatos y narices. Tenemos cuatro compañías que hacen residencia con nosotros que se van a presentar, entre ellos una compañía de La Pincoya y viene una banda que hace cumbia y circo.