Despedimos al poeta, ensayista y artista visual chileno Ronald Kay

El artista nacional Ronald Kay Mahn falleció la tarde del 21 de septiembre. Lo despedimos agradeciendo su reflexión crítica y su valioso aporte a la cultura en Chile. “Era un gran amigo, conspirador de sueños, bueno para la talla, humano y chileno hasta la médula”, recuerda Carmen Romero.

Es 1941 y en plena Guerra Mundial, en Hamburgo, nace Ronald Kay Mahn. Hijo de madre chilena, llegó a nuestro país seis años más tarde, donde desarrolló una alabada carrera como poeta, ensayista y artista visual, que terminó la tarde del 21 de septiembre cuando falleció en su casa de Santiago.

El artista -que en 1980 conoció a la bailarina, coreógrafa y directora alemana Pina Bausch, de quien enviudó en 2009 y con quien tuvo un hijo, Rolf Solomon- fue responsable, a mediados de la década del 70, de inéditas iniciativas que mezclaban literatura, artes visuales y reflexión crítica, como la revista Manuscritos,  impulsada por el Departamento de Estudios Humanísticos de la Universidad de Chile, cuya única edición circuló en 1975.

Carmen Romero, directora ejecutiva de Fundación Teatro a Mil, lo recuerda como “un gran amigo, conspirador de sueños, bueno para la talla, humano y chileno hasta la médula. Un imprescindible o ‘eslabón perdido’ del movimiento de las artes en el Chile de los 70 junto a Enrique Lihn y Catalina Parra”. Además, fue él quien bautizó la última pieza de Pina “..como el musguito en la piedra, ay sí, sí sí…”.

Entre sus obras escritas, además, destacan los libros de poesía Deep Freeze. Los inéditos de la década de los 60, Variaciones Ornamentales, y el ensayo Del Espacio de Acá.

Sobre su legado artístico y su aporte a las letras chilenas, el Ministro de Cultura, Ernesto Ottone, dijo en diario El Mercurio que “su mérito mayor es, sin duda, haber introducido una forma de pensar crítica con respecto a lo que eran las vanguardias, la nueva poesía, la literatura, en fin… Fue un hombre muy completo…. Va a dejar un legado bastante grande para Chile y la historia de la humanidad en América Latina”.

Estas palabras de Ronald Kay, dan cuenta de sus múltiples inquietudes artístas, en su despedida agradecemos ese entusiasmo por las letras y por el arte.

“Primero estudié dos años leyes, donde fui compañero de Raúl Ruiz. Allí hacía ayudantía Ricardo Lagos. Luego, a causa de una profunda crisis personal me fui un año a Oxford, donde estuve en el curso de Isaías Berlin, autor del libro de Marx. Me dediqué mucho a estudiar. Antes había escrito un poco de poesía y me fui un mes de vacaciones a París, eso fue más que una formación universitaria. Yo vi a Moreau, a Cocteau…Todos los días iba al teatro. Vi obras originales de Ionesco y de otros grandes autores. En Oxord, en un cine pequeño, el año ’60, vi Shadows, de Cassavetes, cuando recién salía”.

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A título de ejemplo

La página carcomida por su propia escritura
Propaga la última palabra del progreso:
La muerte del autor en el número fantasma
De las bellas letras. La ilusión óptica
De que el bosque a cada paso ofrece
Admirables temas de pintura,
Traerá consigo el olvido total.
Más allá de los poderes de falsificación,
La honestidad es la ortografía
El último cuadro, inconcluso.

Ronald Kay (Hamburgo, 1941) Variaciones ornamentales, Ediciones Universidad Diego Portales, 2009, Santiago de Chile

Aquí puedes revisar una entrevista al  filósofo, teórico del arte y poeta Ronald Kay, que le hizo Justo pastor Mellado, en septiembre del 2007

 Foto principal: Ronald Kay y Pina Bausch